La Superintendencia de Medio Ambiente ordenó la medida provisional, tras autorización del Tercer Tribunal Ambiental, en contra de la empresa Cooke Aquaculture.
La Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) ordenó, previa autorización del Tercer Tribunal Ambiental, la detención parcial de actividades relativas al proceso de siembra en el Centro de engorda de salmones Huillines 3, ubicado en el Estero Cupquelán, dentro del Parque Nacional Laguna San Rafael (Región de Aysén), debido al inminente peligro para el medio ambiente que constituye la futura siembra de 170 mil salmones, considerando que dicho lugar no cuenta con evaluación ambiental.
En este caso, la SMA inició un proceso en 2021 contra la empresa por nueve incumplimientos ambientales asociados a 3 centros: Huillines 2, Huillines 3 y Punta Garrao, todos ubicados al interior del área marina del Parque Nacional.
Respecto de Huillines 3, dicho centro no fue evaluado ambientalmente —por comenzar a operar antes de la instalación del Sistema de Evaluación Ambiental—, y se regula mediante una concesión de Acuicultura y Proyecto Técnico.
«En este caso, mediante inspecciones realizadas en terreno con CONAF, Sernapesca y profesionales de la SMA, pudimos advertir que la empresa superó en los años 2012, 2014, 2016 y 2020 el total de producción aprobada en hasta 6.500 toneladas por ciclo productivo«, explica Benjamín Muhr, fiscal (S) de la SMA.
Adicionalmente, la Subsecretaría de Acuicultura informó a dicha oficina que se autorizó a Cooke Aquaculture la siembra de 617.756 peces en el centro Huillines 3 el pasado 3 de agosto.
«Esto constituye un estimado de más de 2 mil toneladas por sobre lo autorizado. Sernapesca nos informó que ya la empresa ha sembrado 432.352 peces y solicitó un nuevo permiso el 17 de octubre para el restante de peces, es decir, 170.000 peces para trasladarlos de la Región de la Araucanía para ser sembrados en el centro de engorda Huillines», explica.
«Se hace presente que el resto del ingreso de peces no se pudo paralizar porque el procedimiento se suspendió por orden de la Corte de Apelaciones de Coyhaique en virtud de dos recursos de protección de la empresa», agregó Muhr.
Ante esto, y considerando el peligro inminente para el medioambiente, respecto a la continuidad de un proyecto que no se ha evaluado ambientalmente, se solicita al Tercer Tribunal Ambiental con sede en Valdivia, la detención de dicho proceso de siembra de 170 mil especies.
Al respecto, el Superintendente del Medio Ambiente (s), Emanuel Ibarra, sostiene: «Si bien el titular puede realizar actividades que se iniciaron de manera previa a la entrada en vigencia SEIA sin contar con Resolución de Calificación Ambiental, en caso de que decida modificar el proyecto, debe someterse a evaluación ambiental obligatoria si dicha modificación constituye un proyecto o actividad listado en el artículo 3 del Reglamento del SEIA, es decir, que se trate de un proyecto susceptible de causar impactos ambientales, lo cual evidentemente ocurre en este caso».
En este caso, la infracción de elusión al SEIA tiene efectos ambientales que recaen sobre la columna de agua, el suelo marino y la flora y fauna acuáticas, de un área protegida por el Estado, el Parque Nacional Laguna San Rafael.
Finalmente, respecto al procedimiento sancionatorio que se sigue en este caso, cabe señalar que éste ha sido judicializado por Cooke Aquaculture en dos oportunidades (mayo 2021 y julio 2022), mediante Recursos de Protección en la Corte de Apelaciones de Coyhaique. En ambos procedimientos se dictaron Órdenes de No Innovar, que paralizaron el procedimiento administrativo sancionatorio. El primer recurso fue rechazado por la Corte Suprema mientras que el segundo se encuentra en tramitación.
La SMA elevó un Recurso de Queja ante la Corte Suprema, la cual el pasado 14 de octubre dejó sin efecto la última orden de no innovar, lo que ha permitido avanzar en el proceso y ordenar la detención de la siembra de salmones.